Sábado, 05 de marzo

VIVIR LAUDATO SI’ ESTA CUARESMA

“¿Para qué nos necesita esta tierra? Por eso, ya no basta decir que debemos preocuparnos por las futuras generaciones. Se requiere advertir que lo que está en juego es nuestra propia dignidad. Somos nosotros los primeros interesados en dejar un planeta habitable para la humanidad que nos sucederá. Es un drama para nosotros mismos, porque esto pone en crisis el sentido del propio paso por esta tierra.”

-Papa Francisco, Laudato Si‘, # 160 (Alabado Sea)

La Historia de esperanza de Plato de Arroz de CRS de esta semana nos presenta a una madre e hija de Ruanda. Odette estaba preocupada por la salud y el bienestar de su hija, Olga, y trabajó con diligencia mucho antes de que ella naciera para asegurar que tuviera lo necesario para crecer fuerte y sana. Tal vez es fácil ver nuestro principio fundamental de la doctrina social católica en acción en esta historia: el respeto por la vida y la dignidad de Olga motivo a Odette a cuidar de ella desde la concepción hasta el nacimiento y más allá.

El Papa Francisco—como tantos papas antes de él—emite un reto importante. Él nos pide proteger y defender la dignidad de los que vienen después de nosotros. No sólo lo exige nuestra propia dignidad; estamos llamados a reconocer cómo se entreteje el cuidado de nuestro planeta en esa dignidad. Estamos llamados a reflexionar sobre las exigencias de la justicia intergeneracional, en lo que podemos hacer hoy para proteger a los que anden esta tierra mañana.

Esto nos hace pensar en la comunión de los santos, esa gran familia de Dios. Pensamos en todos aquellos hombres y mujeres santos que nos precedieron, que lucharon con las pruebas y alegrías de la vida, y nos enseñaron a hacer lo mismo. ¿Qué nos han dado? Nos llena de humildad pensar en las muchas generaciones que han atravesado este planeta, labrado la tierra, respirado el aire, bebido el agua. Así como nuestros bisabuelos recorrieron esta tierra, así también, oramos, lo harán nuestros bisnietos. La tierra nos une a todos. Reconocemos, tal vez, que estamos llamados a la responsabilidad intergeneracional—y que el cuidado de la creación es fundamental.

¡NO OLVIDES LA COLECTA DE CRS MAÑANA!